Una larga serie de actos violentos, criminales y antisociales fueron difundidos en los últimos meses a través de plataformas que ofrecen videos en directo.
El suicidio de un joven actor de Hollywood transmitido en directo por Facebook Live fue el último hecho perturbador de una larga serie de actos violentos, criminales y antisociales difundidos en los últimos meses a través de esta red social.
Su trágica muerte vuelve a poner de relieve los retos éticos a los que se enfrentan las redes sociales y las empresas tecnológicas que invierten enormes fondos en las transmisiones en vivo.
Según informa el periódico 'The Wall Street Journal', el año pasado al menos 57 actos violentos, incluidos tiroteos, robos y agresiones físicas, fueron transmitidos a través de plataformas que ofrecen videos en vivo, como Facebook.
Mary Anne Franks, profesora de la Facultad de Derecho de la Universidad de Miami, asegura que la oleada de incidentes de este tipo plantea preguntas espinosas relacionadas con las redes sociales. Aunque Facebook y otras compañías tecnológicas probablemente no tengan responsabilidad legal, sí tienen, según la profesora, la obligación ética de considerar el potencial daño que sus productos pueden llegar a causar.
"Necesitamos tener una conversación sobre el papel que desempeñan tecnologías como las transmisiones en vivo", comentó Franks al periódico. "¿Hasta qué punto herramientas como Facebook Live animan a la gente a cometer estos actos?"
"Compartir videos de suicidios es peligroso"
Kyle MacDonald, una psicoterapeuta neozelandesa, considera que "compartir videos de suicidios es peligroso". Según escribe en su columna para el periódico 'The Guardian', los videos que muestran cómo una persona comete "el acto más grave de daño propio no son apropiados para la vista pública".
MacDonald cita varios estudios que indican que cuando se informa con detalle sobre estos sucesos, explicando por ejemplo la forma en cómo la persona se quitó la vida, se produce un fuerte aumento de suicidios "que lo imitan". Las personas vulnerables pueden sentirse animadas y verse influenciadas por los detalles que se revelan sobre estas historias.
A pesar de lo que muchos podrían pensar, apunta la psicoterapeuta, no se puede disuadir a la gente con tendencias suicidas de quitarse la vida con una explicación de lo doloroso que podría ser la muerte que han elegido. Con estas personas no funciona la táctica de choque, sino la táctica de cuidado, insiste MacDonald.
"Ser consciente con los problemas de salud mental"
Facebook se ha comprometido recientemente a ser sensible y consciente con los problemas de salud mental y el impacto de los videos gráficos sobre las autolesiones y las conductas suicidas. Además, la red social, según una portavoz, cuenta con equipos de expertos que revisan el contenido sensible reportado por los usuarios y dispone de sistemas para garantizar su manejo de manera urgente.
A pesar de esto, tras el caso de Katelyn Nicole Davis, una niña estadounidense de 12 años que también transmitió su suicidio en tiempo real por Facebook Live a principios de enero, la red se ha negado a bloquear o eliminar enlaces que vinculan al video de 42 minutos que muestra cómo se quitó la vida la niña.
La mayor red social del mundo declaró que no puede asumir la responsabilidad debido a que el video ya no se encuentra alojado en su plataforma. Asimismo, agregó que el contenido del video no viola sus normas comunitarias.