En las vías rápidas de Brasil, una mujer descalza caminaba al borde del precipicio amenazando con suicidarse. Felizmente, un policía valeroso no encontró mejor forma de calmar el momento hablándole de Dios en el acto.
La operación de socorro, al mando del teniente Wesley Eufrásio, fue un éxito porque fueron capaz de calmar a una mujer a punto de suicidarse, a la cual no se reveló su nombre. El incidente ocurrió en Carnival Buraco do Tatu, en la Plataforma Inferior de Rodoviária de Brasília. Después de que la situación estuvo bajo control, el sargento Claudio Celestino consiguió actuar con rapidez, impidiendo que la mujer se suicide.
El teniente recibió muchos elogios por su actuación, pero asegura que sólo cumplía con su deber. “Entré en esta profesión para salvar vidas y hacer justicia, protegiendo a la sociedad. Cuando me di cuenta, la situación había sido controlada, yo estaba muy feliz y aliviado por haber salvado una vida”, explica.
Él reveló que la mujer era una moradora de la calle y parecía estar bajo la influencia de las drogas cuando amenazó con suicidarse. “Ella era conocida por los policías del puesto de Rodoviária. Durante el intento de suicidio, ella habló muchas cosas sin sentido, dijo que no era querida por la familia y que sería un alivio para todo el mundo si ella moría”, dice.
Cuando se le preguntó qué le había dicho a la mujer para calmarla, el teniente Wesley dijo:
“Tenemos que tratar de tranquilizar a la persona. Entonces empecé a hablarle de Dios, diciendo que podía cambiar su situación y transformar su vida. Allí, ella se fue calmando y se volvió un poco para mirarme. En ese momento, actuó el sargento Celestino y evitó que se suicidara”.
Tras el rescate, la mujer sin hogar fue remitida al Hospital de Base para ser medicada, donde se identificó que es una consumidora de crack.
