Investigadores de Brasil advierten que el desastre ambiental que se registra en el país aún es ignorado por las autoridades competentes del vecino país. “Según el último informe del Ministerio de Salud, fueron registradas 4.240 muertes de monos que están asociadas a actual epidemia de fiebre amarilla silvestre. Lamentablemente, sabemos que es una pequeña parte de lo que ya murió”, advirtió el académico de la Universidad Federal de Espírito Santo (UFES), Sergio Lucena.
Agregó que “se está a la sombra del drama en Salud Pública, hay un desastre ecológico que está siendo ignorado. Excepto que en Espíritu Santo, en la Secretaría de Medio Ambiente se está financiando un estudio sobre el impacto de la fiebre amarilla sobre los primates, aún no he visto declaraciones de los órganos ambientales estatales y nacionales sobre ese tema”, advierte el investigador brasileño en la Red O Globo.
“Esperaba que no sólo el ministro de Salud tratara el tema en público, también el ministro del Medio Ambiente. Especies estratégicas para los ecosistemas forestales y en peligro de extinción están siendo destruidas y, salvo algunos sectores técnicos y la prensa, el tema sigue siendo ignorado por el área ambiental. La fiebre amarilla, más que nunca, demuestra que la salud humana y salud ambiental deben ser tratadas de manera integrada”, remarcó Lucena.
La Universidad Federal de Espírito Santo (UFES), encontró el jueves dos monos con vida en Goaiabeiras Campus, en Victoria, y estaban con fiebre amarilla. Los monos están sueltos y están siendo supervisados por investigadores de la universidad.
El coordinador de la acción que supervisa los monos, profesor Sérgio Lucena, dijo que la contaminación de los monos de la fiebre amarilla indica que hubo presencia de los mosquitos que transmiten la enfermedad en la región, ya que el análisis fue enviado a principios de este mes.”No podemos descartar la posibilidad de que todavía están estos mosquitos en la zona. De ahí la importancia de la inmunización de las personas que circulan en la región “, advirtió.
