Cuatro poblaciones resultan gravemente dañadas por l seísmo, registrado cerca de la ciudad santa de Mashad
Un terremoto de magnitud 6,1 en la escala de Richter ha golpeado este miércoles por la mañana la provincia de Jorasán Razavi, en el noreste de Irán, informa el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) y la prensa local. Funcionarios locales han informado a la televisión estatal de dos personas muertas y de varios heridos a causa del seísmo, del que ya se han registrado 20 réplicas. Además, cuatro poblaciones han resultado seriamente dañadas por el sismo, registrado cerca de la ciudad santa de Mashad, según las mismas fuentes.
Equipos de la Media Luna Roja y de los servicios de emergencia han sido desplegados en la zona.
El epicentro se ha situado cerca de la localidad de Sepidsang, a 76 kilómetros de Mashdad, la segunda en población del país, y a una profundidad de 33 kilómetros. El terremoto se ha producido a las 6.09 GMT (una hora más en la España peninsular). "Ha sido horrible, hizo mucho ruido, todo temblaba", ha declarado un residente de Mashhad a la agencia AFP por teléfono.
El jefe adjunto de las operaciones de rescate de la Media Luna Roja iraní, Shahin Fathi, ha señalado a la agencia oficial ISNA que hasta ahora se han registrado dos muertos en Jorasán. Cuatro pueblos han quedado destruidos entre un 40 y un 100%, pero la cifra de víctimas no es muy elevada debido a que el epicentro del terremoto estuvo en una zona poco poblada, ha indicado la Media Luna Roja de Mashad.
El corte de las comunicaciones telefónicas y de varias carreteras de la provincia impide tener todavía una cifra definitiva de heridos, que se sitúan entre seis y 11, dependiendo de las fuentes. También el suministro de agua ha sufrido cortes y las escuelas han sido cerradas en muchas zonas de Jorasán, incluida la ciudad de Mashad, donde una de las réplicas tuvo una magnitud de 4,7 en la escala Richter.
Por su parte, el jefe de los Servicios de Emergencia, Pir Hosein Kolivand, ha advertido de que existe la posibilidad de nuevas réplicas y de un aumento del número de heridos. Las imágenes publicadas en las redes sociales muestran profundas grietas en calles y edificios.
Irán es un país habitualmente golpeado por terremotos de fuerte intensidad, como el de diciembre de 2003 en Bam, en la provincia de Kerman (sudeste), que mató a al menos 31.000 personas y destruyó casi por completo la ciudad. En junio de 1990 otro temblor causó 37.000 muertos.