La pregunta constante que se hacen los hermanos: ¿Por qué quieres salir de tu iglesia?
La mayoria responde: “Mi pastor no es pastor, es un Coach; no soy oveja, soy coachee; La iglesia no es iglesia, es una empresa y los cultos no son más cultos, son conferencias motivacionales, totalmente carnales.
En vez de que Jesús sea el centro, entró la “visión” del hombre y en el lugar del “id y haced discípulos a las naciones”, entró el “id y golpea las metas”!
Las palabras del positivismo son fuertes y chocan a las personas, pero la mayoria de las instituciones religiosas la llaman “Iglesias”.
Debemos entender que la misión no es de mi iglesia, de su iglesia o de la Iglesia como un todo, es de Dios, y lo que hace una Iglesia es crecer es el Espíritu Santo y no metas de hombres.
Se puede apreciar en varias iglesias estructuradas en la visión “celular” es que sus líderes piensan que realizando esto, haciendo cursos de coach y estimulando a sus miembros a convertirse en líderes de células, supervisores e incluso pastores, dan a entender que sus iglesias crecerán. Y esto lo unico que forma son personas vacias espiritualmente.
La llamada visión celular intenta demostrar que la Iglesia puede ganar miles de almas para Cristo y cuidar a sus discipulo1 a 1. Entonces, vemos a personas cuidando la vida de las otras haciéndose de psicólogos, terapeutas , olvidando completamente que la visión es sobre un cuidado espiritual, y no respecto a la vida secular de cada uno.
Jesús cuidó de sus discípulos predicandoles la Palabra de Dios, y ese es el ejemplo que debemos seguir.
La misión de un siervo de Dios
Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y !!ay de mí si no anunciare el evangelio! “1 Corintios 9:16
La verdadera meta de un siervo de Dios “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”. Marcos 16:15
El temor de un siervo de Dios en predicar el evangelio de Cristo Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema”. Gálatas 1: 8
La visión de un siervo (a) de Dios para el reino
“Pues no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el evangelio; no con sabiduría de palabras, para que no se haga vana la cruz de Cristo. “1 Corintios 1:17
Fuente: Gospel Prime y Tiempo Cristiano