Miles de personas en Estados Unidos viven en una profunda depresión que, en la mayoría de los casos, los lleva al suicidio. En medio de esta crisis, cientos de estadounidenses, están empezando a buscar a Dios, así lo informa Mission Network News.
Cada estadounidense conoció por lo menos a una persona que se quitó la vida. "Mi nuera que es estadounidense, mi hermano y dos sobrinos murieron, todos se suicidaron", cuenta Hutchcraft. Para él, la única respuesta ante sus múltiples sufrimientos emocionales ha sido Jesús, pero el gran obstáculo es la falta de evangelizadores.
Para un estadounidense no es fácil seguir a Jesús. A pesar de contar con varias iglesias, solo el 4% de la población reconoce a Jesucristo como su Salvador. Lamentablemente, no están dispuestos a saber de Jesús, a no ser que otros estadounidenses puedan evangelizarlos.
Mission Network News también indica que en Estados Unidos existe la creencia que Jesús era un hombre de piel morena, por lo cual, muchos optan por rechazar oír el evangelio. Gracias a Dios, cientos de jóvenes estadounidenses han obedecido el llamado de Dios y están recorriendo el país llevando el evangelio.
Este equipo trabaja de manera didáctica, organizan actividades espirituales y comparten alimentos. Así crean un ambiente agradable para establecer relaciones. Luego, los mismos jóvenes comparten su testimonio presentando a Jesucristo como su mejor amigo y Salvador. ¡Oremos por esta nación!