Una tarde, en contra de su propia voluntad, decidió acompañar a la Iglesia a un amigo, quien le había invitado para que asistan juntos al lugar. Llegaron al anfiteatro donde observó alrededor de 23 mil personas que se habían reunido para oír el mensaje de la palabra de Dios.
Cuando su madre se enteró que estaba embarazada, recurrió al mismo doctor para realizarse el tercer aborto de su vida, sin embargo este se negó rotundamente a realizarlo. Emeal Zwayne, nació en Líbano, 1975.
"Mientras ella estaba sentada en el consultorio, literalmente esperando que terminara mi vida, el médico solo la miró y simplemente dijo: 'No voy a dejar que hagas eso".
En 1980 emigró a EE.UU con su familia, adaptarse le fue muy difícil, puesto que estaba en la etapa de la adolescencia, fue en ese momento en el cual se sumergió en el mundo del Rap. A los 15 años se convirtió en un pandillero integrante de unas de las bandas más temibles del país, Los Crip.
"Nuestro objetivo era ser simplemente cool y pretender ser duro, defender nuestro territorio sin importar lo que significara", menciona.
Acogiendo muchos vicios, cierta vez intentó quitarse la vida frente su propia familia, a partir de esto, sus días fueron aún más oscuros y tristes. Sin embargo en muchas oportunidades pedía a Dios en oración ayuda para abandonar ese estilo de vida.
Una tarde, en contra de su propia voluntad, decidió acompañar a la Iglesia a un amigo, quien le había invitado para que asistan juntos. Llegaron al anfiteatro donde observó alrededor de 23 mil personas que se habían reunido para oír el mensaje de la palabra de Dios.
"Sentía que mi corazón comenzaba latir. Lo que decía el Pastor, era todo lo que me pasaba, eran muchas noches meditando en mi forma de vida y oraba porque esta cambie. Entonces comencé a pensar en que tenía que darle toda mi vida a Dios, pero me invadían los pensamientos del estilo de vida que tenía en los “gángsters”, pensaba que no podía acabar con mi inmoralidad, mis vicios, y otras cosas” narra.
De pronto el pastor de la Iglesia, empezó a hablar de la Salvación que solo Cristo otorga a nuestras vidas y todo sus pensamientos equivocados desaparecieron, se sentía seguro. Todavía recuerda aquel momento en el que solo las lágrimas recorrían sus mejillas, confesando sus pecados y pidiendo perdón de todo corazón al único y eterno Dios, sintiendo su presencia como nunca antes.
“Y fue instantáneo. Recuerdo que sentía como si un peso de 1000 libras me lo hubieran quitado de los hombros. Y ocurrió una transformación en mi ser de inmediato. Entonces entendí que nada volvería a ser lo mismo, pero no imaginaba cómo Dios me iba a cambiar. No sabía que por su gracias y misericordia, algún día me convertiría en un pastor” testifica.
Hoy Emeal Zwayne está casado, es padre de 5 hijos y es Pastor, realiza una obra evangelística alrededor de todo el mundo.
